Tres formas comunes de lidiar con la culpa incluyen:
¿Cuál podría ser el aspecto más desagradable del pecado? Dios quiere que nos centremos en el aprendizaje de nacer del espíritu; el de su gracia, el de las cosas necesarias en el cielo.
Las tentaciones son barreras que consumen nuestra energía cada vez que andamos cerca de ellas. Retrasan o bloquean nuestro enfoque en su plan de lección al enseñarnos. Si no se controla, el pecado competirá con quien es nuestro maestro. De ahí el propósito del arrepentimiento. Dios perdona completamente porque quiere que el pecado quede atrás para que podamos centrarnos de nuevo en Su camino.
Cuando aparezca la culpa del pasado, en lugar de revivir ese ciclo, ¿qué tal "dar gracias a Dios por su perdón"? Si la culpa no puede ser superada a través de la oración, considera consultar a un mentor de confianza, o a un consejero profesional que también sea cristiano.
En una investigación de múltiples víctimas, un oficial de policía entrevistó a una joven víctima de abuso sexual por tercera vez después de que ella afirmara que no había pasado nada. Esta vez, el agente hizo hincapié en que, antes del abuso, la víctima había pedido a un amigo que la llevara a casa, pero fue rechazada. La víctima se dio cuenta de su intento de evitar la situación, desapareció la autoculpabilidad y proporcionó detalles del abuso sexual.
Un buen consejero puede ayudar no sólo con las habilidades de afrontamiento, sino también compartir percepciones mientras pone las cosas en perspectiva.
¿Te sientes abrumado, pero no estás preparado para un asesoramiento personal? Piensa que este día no se trata de ti, sino de Él. Lee el Nuevo Testamento y reza. Busca el apoyo de otros cristianos que hayan superado una lucha similar y de organizaciones que hagan lo mismo. Una búsqueda prudente en Internet puede ser "faith based ________ recovery". Se han escrito volúmenes sobre diversas luchas.
¿Por qué tenemos que afrontar la tentación y la culpa? La respuesta es sencilla: Dios nos creó así.
¿Alguna vez te has sentido frustrado por el deseo de cambiar, pero los defectos se interponían en tu camino? Entonces lee el Nuevo Testamento y concéntrate en cuántas veces los discípulos, a quienes Jesús seleccionó, cometieron errores. El discípulo Pedro fue un buen ejemplo.
¿No es bastante egoísta esperar que las capacidades de uno sean mayores que las de los discípulos? La próxima vez que surja esa frustración, muestra un poco de compasión hacia ti mismo. Dios nos creó así para motivarnos a acudir a Él en oración con humildad y el deseo de volvernos hacia Su luz. Somos una obra en proceso.
Jesús enseña que el pecado puede comenzar dentro de los pensamientos de uno antes de actuar físicamente en el pecado. Jesús enseñó: Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. Mateo 5: 27-28
El pecado y la culpa a veces pueden evitarse. Antes de considerar cometer un pecado, cree el hábito de saltar a la oración cuando tal pensamiento surja por primera vez. Tal oración puede comenzar con: "Querido Padre Celestial, permite que mis ojos se enfoquen en ti". A continuación, entrégale lo que hay en tu corazón. Concentre-se na fonte que motiva a tentação, como a falta de humildade ou egocentrismo, em vez de no sintoma que motiva o incidente.
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